Los cachorros durmiendo con huevos de Pascua en un nido decorado. Este es un evento especial celebrado en el Centro de Rehabilitación Silver, Zagreb, en Croacia, para recibir el domingo de Pascua. Estos cachorros no son perros normales, sino que sirven como perros guía para las personas con discapacidad y para niños con dificultades de desarrollo en toda la región de Europa.
Para tener un perro guía, se requieren 8 meses de entrenamiento intenso, el que incluye ejercicios como obediencia, indicar los bordes de la acera, los escalones, evitar obstáculos, encontrar cruces de carreteras, paradas de autobús y tranvía, navegar en el tráfico, etc. Además de aprender a recibir órdenes, un perro tiene que saber cómo encontrar las soluciones más seguras y más apropiadas en numerosas situaciones, para mejorar la independencia, la seguridad y la velocidad de viaje de una persona con discapacidad visual.