En un lugar idílico junto al mar en la costa de Yorkshire, Reino Unido, se encuentra una maqueta de un pueblo en la que el tiempo se ha detenido casi por cuatro décadas.
La obra maestra en miniatura, conocida como Bondville Model Village, abarca alrededor de 200 casas, tres iglesias, un puerto, un ferrocarril e incluso un monumento de guerra, todo en una doceava parte de su tamaño real. Ubicado entre un acre de colinas verdes, es un mundo que no tiene tiendas de teléfonos móviles y demás adornos de la moderna calle comercial.

La obra maestra en miniatura, conocida como Bondville Model Village, abarca alrededor de 200 casas, tres iglesias, un puerto, un ferrocarril e incluso un monumento de guerra, todo en una doceava parte de su tamaño real.
La maqueta está lista para salir a la venta. "Si se vende, es posible que haga algunos cambios. Quizás el nuevo propietario quiera darle un mini cibercafé", dijo Tim Whitehead, propietario de la atracción en Sewerby Road de Bridlington durante ocho años.

Ubicado entre un acre de colinas verdes, es un mundo que no tiene tiendas de teléfonos móviles y demás adornos de la moderna calle comercial.