La liberación de un prisionero condenado por su abuso sexual a una menor ha provocado una oleada de indignación en Corea del Sur. Cho Doo-son, nombre del autor de los hechos, fue hallado culpable de violación con uso de violencia a una niña de 8 años.
Después de 12 años en prisión, fue puesto en libertad el sábado y volvió a su casa cerca de Seúl. Su sentencia fue reducida de 15 años por el atenuante de que estaba bajo los efectos del alcohol cuando cometió el crimen. Cientos de miles de personas en Corea del Sur han firmado una petición para que reciba una condena a cadena perpetua.

Cho Doo-son, nombre del autor de los hechos, fue hallado culpable de violación con uso de violencia a una niña de 8 años.