(Fuente: AFP)
Entre las altas montañas de la provincia de Lima, a 80 km de la capital peruana, una milenaria red de canales de piedra surca las laderas de los cerros para transportar agua de lluvia, ríos y quebradas e infiltrarla en la tierra hacia los acuíferos subterráneos.
En la comunidad campesina San Pedro de Casta, en la provincia limeña de Huarochirí, también le llaman la "siembra del agua" porque les permite disponer todo el año del recurso natural.
Estos canales no solo son clave para las poblaciones locales. También contribuyen a la subcuenca del río Santa Eulalia, que provee agua a Lima, asentada en un desierto que la deja con gran riesgo hídrico.

Estos canales no solo son clave para las poblaciones locales.