(Fuente: AFP)
330.000 velas encendidas para batir un récord en coincidencia con el Día Mundial de la Tierra. La iniciativa fue de la secta tailandesa Dhammakaya, en la provincia de Pathum Thani. La meta era lograr la imagen en llamas más grande del mundo.
Pese a su belleza, la imagen provocó polémica sobre el impacto de la iniciativa sobre el medio ambiente: una ONG cuestionó que las velas suelen ser creadas con parafina, un subproducto del petróleo.
"Solo las encendimos por un momento breve y nuestras buenas intenciones se sentirán por parte de personas en todo el mundo y hará que presten atención a lo que intentamos mostrar", explicó una fiel, Juntira Komasatit.

Las velas recrearon el mapa de los continentes de la Tierra y una figura de Buda.