A comienzos del siglo XXI, China entró en un período clave para su desarrollo económico y social. Al mismo tiempo, se acumularon e intensificaron diversas contradicciones nuevas y antiguas, así como problemas sociales. Si se podían o no resolver de manera adecuada los asuntos relacionados con el bienestar de la gente en ese período, se convirtió en la nueva prueba de gobernabilidad para el Partido.

La reforma sanitaria es un tema delicado en todo el mundo. Para China, un país en vías de desarrollo con una población gigantesca, dar una buena respuesta es aún más difícil y desafiante.

A medida que se elevaba el nivel de vida del pueblo, lograr que más gente tuviera acceso a tratamiento médico, pudiera solventar los gastos relacionados y pudiera recuperar la salud, se convirtió en el punto clave para consolidar el fundamento de la vida del pueblo y el rumbo de la reforma del sistema sanitario del país.

Desde el inicio de la reforma y apertura, el establecimiento y la mejora gradual del sistema de garantía de un nivel de vida mínimo para la población urbana y rural, constituyen una parte importante de las labores del Partido y del Gobierno para resolver los problemas relacionados con la vida de la gente.

Solucionar los problemas relativos a la agricultura, el campo y el campesinado, siempre ha sido la máxima prioridad para el Partido. 

En octubre de 2005, la Quinta Sesión Plenaria del XVI Comité Central del PCCh propuso formalmente la gran misión histórica de construir un nuevo campo socialista.

El 1 de enero de 2006, fue abolido el Reglamento de impuestos agrícolas de la República Popular China. Desde entonces, los campesinos chinos se despidieron de los "impuestos agrícolas" que debieron pagar durante más de 2.600 años.

Esforzarse para garantizar que las personas tengan oportunidades de recibir una buena educación y promover la equidad educativa son un objetivo importante de la construcción integral de una sociedad modestamente acomodada. También es la propuesta clave para que la educación sirva a la construcción de la modernización socialista y al pueblo.

Cuando se trata del bienestar del pueblo no existen detalles pequeños. Para el PCCh, que siempre prioriza al pueblo y su felicidad, el mejoramiento de la vida de la gente solo tiene puntos de partida, nunca llega al final y siempre está en camino.