De acuerdo con la absurda orden emitida por el presidente de Estados Unidos en mayo de exigir a la agencia de inteligencia que investigue el origen de la nuevo coronavirus, esta última debe presentar un llamado informe de investigación dentro de medio mes. Antes de la fecha límite, unos medios de comunicación estadounidenses, políticos, la agencia de inteligencia y otras personas están intensificando la ficción de novelas, lanzando frenéticamente un juego que difama a China.
En día 5, CNN publicó un llamado informe especial, afirmando que la agencia de inteligencia estadounidense había encontrado un "tesoro" de datos genéticos durante la investigación, que contenía datos genéticos del Instituto de Virología de Wuhan. Una vez descifrado, puede ser la clave para descubrir el origen del nuevo coronavirus. Sin embargo, el informe también reconoció que no está claro cómo y cuándo la agencia de inteligencia estadounidense obtuvo esta información.
No hay evidencia real, pero desorienta deliberadamente, este informe de CNN obviamente quiere que la opinión pública se concentre en el laboratorio de Wuhan y vuelva a verter agua sucia sobre China. Este tipo de operación es exactamente la vieja forma de difamar a China por parte de algunos medios estadounidenses y occidentales. De hecho, desde que el gobierno de Estados Unidos reinventó la llamada "teoría de la fuga viral de laboratorio" en mayo de este año, algunos medios estadounidenses y occidentales le han seguido.
Por ejemplo, el Wall Street Journal tomó la iniciativa al publicar un artículo en mayo. Sin pruebas, fabricó la historia de tres miembros del personal del Instituto de Virología de Wuhan que enfermaron en noviembre de 2019. En julio, antes y después de que la OMS anunciara el plan de trazabilidad de la segunda etapa para que lo discutieran los estados miembros de OMS, el Wall Street Journal y otros medios estadounidenses y occidentales comenzaron una nueva ronda de ataques contra el laboratorio de Wuhan, y la función de las herramientas políticas fue completamente descubierta.
Además de los roles de la agencia de inteligencia y los medios de comunicación, algunos políticos estadounidenses están ansiosos por hacer su debut, sosteniendo un "sombrero" cosido para ponerlo sobre la cabeza de China.
El congresista estadounidense, Michael McCall, publicó el día 2 una versión renovada del llamado "Informe de trazabilidad del nuevo coronavirus", exagerando con más de 80 páginas la llamada fuga de laboratorio de Wuhan. Las declaraciones contradictorias y las conclusiones infundadas hacen que este informe sea increíble. No es de extrañar que Gennady Onishchenko, académico de la Academia de Ciencias de Rusia y miembro de la Duma Estatal, comentara que el llamado informe de rastreo del nuevo coronavirus de Estados Unidos carece de datos originales y no tiene efecto legal y nada más una novela de fantasía ficticia. El analista estadounidense de asuntos actuales y políticos, Andrew Kribko, señaló claramente que este informe de los republicanos tenía como objetivo desacreditar a China y politizar el tema de la trazabilidad para obtener más apoyo de los votantes en las elecciones de mitad de período del próximo año.
¿Pueden los estadounidenses que están obsesionados con la manipulación política asumir responsabilidades internacionales como los chinos? Preparar la ficción de novelas no puede salvar a los Estados Unidos ni al mundo. Solo respetando la ciencia, uniéndose y cooperando, la humanidad podrá ganar esta batalla sobre el futuro y el destino. ¡Algunas personas de los Estados Unidos deben despertarse lo antes posible!