El aumento en los ingresos y unas mejores condiciones de vida han logrado que en la Región Autónoma del Tíbet, en el suroeste de China, el consumo per cápita de ropa aumente en 584 yuanes (unos 91 dólares) y ha permitido que las marcas de ropa locales se vuelvan cada vez más populares.
En los últimos años, las marcas de moda locales se han multiplicado en el Tíbet. Hay más de 20 tiendas de moda de estilo tibetano en la calle Barkhor, en el centro de Lhasa, la capital regional.
Antes de la década de los 50, funcionarios, aristócratas y lamas de alto rango y sus agentes constituían aproximadamente el 5 por ciento de la población, pero eran propietarios de casi la totalidad de la tierra, los pastos, los bosques, las montañas, los ríos y otros medios de subsistencia. Los siervos y esclavos, que representaban el 95 por ciento de la población local, tenían poco para gastar en ropa, que, además, era de mala calidad.
Según Changchub, un aldeano del distrito de Chushur de Lhasa, en el viejo Tíbet, su familia de seis miembros solo tenía dos prendas de vestir toscas hechas de pulu (una especie de tela de lana tibetana) para usar. Se usaban como ropa durante el día y como edredones por la noche. En aquel momento, incluso llenarse el estómago era un problema.
Li Mei, presidenta del Instituto Tibetano de Ropa y Cultura Étnicas, explicó que el consumo de ropa del pueblo tibetano ha experimentado una mejora. La calidad de vida de los tibetanos ha mejorado significativamente, su ropa se está volviendo cada vez más exquisita y se están moviendo hacia el consumo de alta gama. En comparación con la ropa tradicional tibetana, la ropa tibetana de moda está ganando popularidad ya que es más ligera y cómoda, y su estilo encaja mejor con la estética contemporánea.
Según los datos oficiales, en 2020, el ingreso disponible per cápita de los residentes urbanos en el Tíbet fue de 41.156 yuanes, un aumento interanual del 10 por ciento. El de los residentes rurales aumentó un 12,7 por ciento a 14.598 yuanes.

El aumento en los ingresos y unas mejores condiciones de vida han logrado que en la Región Autónoma del Tíbet, el consumo per cápita de ropa aumente en 584 yuanes (unos 91 dólares).