La Liga Árabe ha expresado su preocupación ante las últimas disputas entre Líbano y Arabia Saudí.
El gobierno saudí ha expulsado al embajador libanés y ha detenido todas las importaciones procedentes de Líbano. Por su parte, Bahréin también ha decidido expulsar al embajador libanés de su territorio. Estos hechos se producen después de que el ministro de Información de Líbano, George Kordahi, calificara de "inútil" la guerra en Yemen liderada por Arabia Saudí. Además agregó que los hutíes solo se están defendiendo. El primer ministro de Líbano ha intentado convencer a Kordahi de que renuncie a su puesto para evitar más problemas. El país se encuentra sumido en una de las peores crisis financieras de su historia reciente.