La elección para el séptimo Consejo Legislativo de la Región Administrativa Especial de Hong Kong de China ha concluido con éxito. El día 20, la Oficina de Información del Consejo de Estado publicó un libro blanco titulado "Hong Kong: Progreso democrático bajo el marco de un país con dos sistemas", que revisa sistemáticamente el desarrollo y la perfección de la democracia de Hong Kong desde cero y explica de manera integral los principios del Gobierno central y la posición en el apoyo al desarrollo de un sistema democrático en Hong Kong acorde con su propia realidad.
¿Quién mantiene y desarrolla la democracia en Hong Kong? ¿Quién destruye y contiene la democracia de Hong Kong? A estas dos preguntas fundamentales, el libro blanco da respuestas claras.
Lanzando una vista retrospectiva a la historia, durante el siglo y medio de dominio colonial de Hong Kong, el Reino Unido había prohibido en varias ocasiones las reformas democráticas en Hong Kong. No había democracia en la sociedad de Hong Kong. Después del retorno de Hong Kong a la patria en 1997, fue la primera vez que los ciudadanos de Hong Kong se convirtieron realmente en dueños de sus propios asuntos, gestionando los asuntos dentro del ámbito de la autonomía de la RAE por su cuenta en el marco de "un país, dos sistemas".
La práctica ha demostrado que el sistema democrático creado por el Partido Comunista de China y el Gobierno chino que se ajusta al principio de "un país, dos sistemas" y las circunstancias reales de Hong Kong garantizan fundamentalmente que los residentes de Hong Kong disfruten de amplios derechos y libertades democráticas. El Gobierno central ha seguido realizando importantes esfuerzos para promover el desarrollo democrático de la región.
Sin embargo, el desarrollo democrático de Hong Kong se ha visto interferido y destruido continuamente. En los últimos años, las fuerzas caóticas y anti-China de Hong Kong se han vinculado con fuerzas hostiles externas y han desafiado constantemente la autoridad de la Constitución y la Ley Básica. Aprovecharon las graves fallas del sistema electoral de Hong Kong para ingresar a la estructura del Gobierno de la RAE, utilizando la llamada "democracia" para dividir el país y subvertir el régimen.
Como se señala en el libro blanco, la principal cuestión que ha surgido en el desarrollo de la democracia de Hong Kong durante más de dos décadas no es si es democrática o no, sino si mantiene o no el principio de "un país, dos sistemas". Es la cuestión de la subversión y antisubversión, así como la intervención y la antiintervención. Las fuerzas anti-China que perturban Hong Kong y las fuerzas externas hostiles detrás son los principales culpables que obstaculizan el desarrollo democrático de Hong Kong.
En el momento crítico que atraviesa Hong Kong, el Gobierno central ha adoptado una serie de medidas para tratar tanto las causas superficiales como las esenciales, como la promulgación e implementación de la Ley de Seguridad Nacional de Hong Kong y la mejora del sistema electoral local para promover la transformación del caos a la gobernanza, y el desarrollo democrático de Hong Kong puede volver a desarrollarse normalmente. La recién concluida elección del séptimo Consejo Legislativo en Hong Kong es una práctica exitosa del sistema democrático con características de Hong Kong.
En la actualidad, los residentes de diversos círculos sociales de Hong Kong esperan con ahínco los nuevos miembros del Consejo Legislativo, y el desarrollo democrático de Hong Kong está mostrando un nuevo fenómeno. El Gobierno central seguirá apoyando la ciudad para que adopte un camino de desarrollo democrático que se adapte a su propia realidad y promoverá el desarrollo de la democracia de Hong Kong en la dirección de adherirse al estado de derecho, hará concurrir la opinión pública y logrará con éxito la buena gobernanza. Cualquier interferencia o destrucción por parte de fuerzas externas está condenada al fracaso. El camino democrático de Hong Kong se hará cada vez más amplio.

En la actualidad, los residentes de diversos círculos sociales de Hong Kong esperan con ahínco los nuevos miembros del Consejo Legislativo, y el desarrollo democrático de Hong Kong está mostrando un nuevo fenómeno.