El Ministerio de Defensa de Rusia hizo una propuesta a los soldados ucranianos refugiados en una planta de acero y hierro de la ciudad asediada de Mariúpol. Rusia prometió un alto el fuego y la apertura de un corredor humanitario para que los últimos soldados ucranianos puedan abandonar Mariúpol, siempre que acepten rendirse. Hasta ahora, ningún soldado ucraniano ha aceptado una oferta similar.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, aseguró que la situación en la ciudad asediada no ha cambiado.
Moscú urgió a Kiev que presione a sus soldados para poner fin a lo que Rusia describe como una "resistencia sin sentido".
Entre tanto, el Ministerio de Defensa de Ucrania afirmó que el objetivo de la nueva ofensiva rusa en el este del país tiene como fin tomar el control de las regiones de Donetsk y Lugansk. El Ministerio considera que, de esta forma, Rusia podría establecer un corredor entre estos territorios y Crimea. Por su parte, el gobernador regional de Lugansk aseguró que las fuerzas rusas ya controlan la ciudad de Kreminna.

Soldados del batallón de voluntarios "Akhmat" en el territorio de la planta siderúrgica de Mariupol Ilyich, donde anteriormente se encontraba la posición de tiro de las tropas ucranianas.