El viernes 29 de abril se registró una explosión en una mezquita de Kabul, Afganistán, que dejó a más de 50 personas muertas y varias heridas. Esto al tiempo que los musulmanes terminan el mes sagrado del Ramadán y se preparan para las celebraciones de Eid.
Una bomba explotó dentro de una mezquita suní en Kabul cuando cientos de fieles se encontraban reunidos para las oraciones del último día del mes sagrado de los musulmanes, el Ramadán.
La seguridad talibán acordonó el área al tiempo que la fuente de la explosión no fue determinada de inmediato. Hasta ahora, ningún grupo se ha hecho responsable por el atentado.

La seguridad talibán acordonó el área al tiempo que la fuente de la explosión no fue determinada de inmediato.
Entre tanto, se registraron otras 2 explosiones en áreas chiíes en Mazar-e-Sharif, capital de la provincia Balkj, en el norte del país.
De acuerdo con reportes, las 2 explosiones se produjeron a solo minutos de diferencia dentro de minibuses cuando la gente volvía a sus casas del trabajo. Un portavoz de la policía dijo que los objetivos aparentemente eran pasajeros chiitas.
El grupo ISKP, una rama de ISIL, se acreditó los ataques. Las explosiones tuvieron lugar tan solo días después de que otro ataque con bomba causara la muerte de al menos 10 personas en Mazar-i-Sharif.