El presidente filipino, Ferdinand Marcos Junior, pronunció su primer discurso sobre el estado de la nación, luego de una arrolladora victoria electoral en mayo.
El discurso se suele dar cada último lunes de julio para informar sobre el estado del país, dar a conocer la agenda del gobierno para el próximo año y pedir a los legisladores que aprueben medidas prioritarias.
El evento también se ha caracterizado por mítines durante décadas. Este año, miles de personas marcharon hacia el complejo del Congreso, exigiendo que la nueva administración aborde los crecientes problemas económicos.