Antes del 30 de septiembre, las tiendas deberán disponer de cierres automáticos en las puertas de acceso, para evitar que se escape el aire acondicionado y no despilfarrar energía.

El alumbrado de los escaparates, además, tendrá que estar apagado desde las diez de la noche. Esta última disposición también se aplicará a los edificios públicos que no estén ocupados en ese momento.

Así lo dispone el Decreto Ley aprobado el pasado jueves 25 de agosto tras una reunión extraordinaria del Congreso de los Diputados de España, o cámara baja, después de que el Consejo de Ministros del Gobierno que preside Pedro Sánchez tomara esta decisión el 1 de agosto.

La medida fue aprobada por 187 votos a favor y 161 en contra, con el apoyo del Partido Socialista de Sánchez (PSOE) y sus socios de coalición, Unidas Podemos (UP), junto a otros grupos como el Partido Nacionalista Vasco (PNV) y la Esquerra Republicana de Cataluña (ERC).

Las opositoras agrupaciones Partido Popular (PP) y Vox rechazaron la medida, que limita a 27 grados centígrados la temperatura mínima en los lugares de trabajo, comercios, centros comerciales y edificios públicos (con la excepción de bares y restaurantes, que podrán bajar la climatización de sus locales a 25 grados); para ahorrar energía.

En invierno, por otra parte, se ha fijado una temperatura máxima de 19 grados centígrados para la calefacción.

Entre las medidas incluidas en la nueva norma se incluye el pago mensual de 100 euros para estudiantes, además de precios reducidos para los abonos de cercanías, media distancia y alta velocidad. Los billetes de los trenes de cercanías serán gratuitos, mientras que los trayectos de media y larga distancia tendrán un descuento del 50 por ciento con respecto al precio habitual.

Aunque el Decreto Ley fue aprobado este jueves, entró en vigor hace dos semanas, produciendo un ahorro energético del 3,7 por ciento en la primera semana y del 9 por ciento durante la segunda.

Con estas medidas, España intentará alcanzar el objetivo de reducir un 7 por ciento su consumo de gas entre el 1 de agosto de este año y el 31 de marzo de 2023, como exige la Comisión Europea.

Antes del 30 de septiembre, las tiendas deberán disponer de cierres automáticos en las puertas de acceso, para evitar que se escape el aire acondicionado y no despilfarrar energía.