¿Quién es el mayor "hacker" de Internet del mundo? El día 5 de septiembre, el Centro Nacional de Respuesta a Emergencias de Virus Informáticos de China y 360 Company, publicaron respectivamente, informes de investigación sobre el ataque cibernético del extranjero contra la Universidad Politécnica del Noroeste de China, agregando más certeza a la realidad.
Los informes de investigación revelan que la Oficina de Operaciones Especiales de Intrusión (TAO, por sus siglas en inglés) de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA, por sus siglas en inglés) de EE. UU. utiliza sucesivamente 41 armas de ataque de red especiales para lanzar miles de ataques contra la Universidad Politécnica del Noroeste de China, robando gran cantidad de datos técnicos clave. La investigación también encuentra que, a lo largo de los años, la TAO ha llevado a cabo ataques secretos de piratería contra empresas chinas de vanguardia, el gobierno, universidades, instituciones de atención médica, de investigación científica y otras, ha controlado equipos de red relacionados y ha robado datos de gran valor. Al mismo tiempo, la agencia también lleva a cabo un control indiscriminado de voz de los usuarios de teléfonos móviles en China, roba de forma ilegal mensajes de texto y realiza posicionamiento inalámbrico.
La cadena de evidencia que se muestra en los dos informes es clara y completa, e involucra a 13 personas que lanzan ataques cibernéticos directamente contra China en los Estados Unidos, así como a más de 60 contratos y más de 170 documentos electrónicos firmados con operadores de telecomunicaciones estadounidenses para construir un entorno de ciberataque. Estas evidencias muestran al mundo las acciones despreciables de la NSA en el ciberespacio, ponen en evidencia las "manos negras" del gobierno de EE. UU. involucrado en el robo cibernético sin fondo y a gran escala, y desvelan contundentemente el rostro de las "víctimas disfrazadas" del gobierno de EE. UU.
Según la información divulgada públicamente, no solo contra China, la mano negra de Estados Unidos que escucha a escondidas se extiende a todo el mundo, incluidos sus aliados. En junio del año pasado, Damarks Radio lanzó un informe especial que revelaba que el Servicio de Seguridad de EE. UU. obtuvo datos sin procesar a través de las conexiones del servicio de inteligencia danés a Internet y monitoreó a políticos de muchos países europeos, incluida Angela Dorothea Merkel. El semanario alemán The Mirror informó que la NSA robó informaciones de más de 500 millones de móviles alemanes y datos de Internet. El "Le Monde" francés informó que alrededor de 70 millones de datos telefónicos en Francia fueron robados por la Agencia de Seguridad de EE. UU. ¡Pruebas irrefutables y definitivas! La afirmación de que la NSA es el mayor "hacker" cibernético del mundo no se niega.
A medida que se descubre más y más evidencia, la mala fama de la NSA ha sido conocida por el mundo durante mucho tiempo. Esta agencia se estableció en 1950 y está afiliada al Departamento de Defensa de Estados Unidos. Durante la Guerra Fría, continuó monitoreando, recopilando e interceptando señales de inteligencia. Tras la aparición de Internet, la NSA estableció la TAO alrededor de 1998, que se encargó especialmente de realizar ciberataques a gran escala y robar secretos contra otros países. Anteriormente, la compañía 360 publicó un informe que decía que la NSA robó de forma remota 97 mil millones de datos globales de Internet y 124 mil millones de datos telefónicos en 30 días.
Una gran cantidad de evidencia muestra que Estados Unidos es el verdadero imperio de hacker, el verdadero imperio de escucha a escondidas y el verdadero imperio de robo de secretos. La hegemonía cibernética no puede generar "seguridad absoluta", las malas conductas de EE. UU. solo harán que sus delitos sean más evidentes. Los informes de investigación publicados por la parte china sobre el ataque cibernético a la Universidad Politécnica del Noroeste de China muestran su determinación de nunca tolerar el robo cibernético y tomar parte en una defensa activa. Todos los países amantes de la paz en el mundo deben tomar medidas para resistir resueltamente a la hegemonía cibernética de EE. UU. y restaurar un espacio limpio para la red global.
