Los candidatos a la Presidencia de Brasil asistieron al tercer y último debate electoral previo a los comicios de este domingo. El debate estuvo marcado por la tensión y discusiones entre el actual presidente, Jair Bolsonaro, y el expresidente y gran favorito para ganar las elecciones, Luiz Inácio Lula da Silva.

Organizado por la televisión Globo y considerado clave para intentar captar los votos de los indecisos, el debate puso de manifiesto la gran polarización que hay en el país, representada por Lula y Bolsonaro, quienes protagonizaron momentos de mucha tensión repletos de acusaciones personales. 

Primero en las encuestas, Lula fue el objetivo de los ataques de los otros seis candidatos a la Presidencia, aunque el exmandatario y líder de la izquierda brasileña defendió su legado y aseguró que fue durante su mandato cuando Brasil tuvo la mayor época de avance social de su historia.

El debate duró más de 3 horas y se prolongó hasta bien entrada la madrugada. Horas antes, se había divulgado un nuevo sondeo, que le da a Lula la victoria con el 50 % de los votos, contra el 31 % de Bolsonaro, aunque debido al margen de error de dos puntos, no se puede establecer si el candidato del Partido de los Trabajadores lograría la victoria en primera vuelta.

Para ser proclamado presidente de Brasil en primera vuelta, Lula necesitaría el 50 % más uno de los votos. Si no lo logra, habrá una segunda vuelta, el 28 de octubre, entre Lula y el segundo aspirante más votado, que todo indica que será Jair Bolsonaro.