España ha consolidado en 2022 su relevancia internacional como destino turístico. Tras el impacto de la pandemia de COVID-19, el país recuperó el año pasado la actividad en el sector del turismo, con 67 millones de visitantes en los primeros once meses del año, que acumularon gastos por valor de más de 80 mil millones de euros. El Gobierno de España está realizando esfuerzos para seguir liderando el mercado de los destinos turísticos inteligentes que mejoran la experiencia del visitante y la calidad de vida de los residentes de las zonas turísticas españolas.

El programa DTI (Destino Turístico Inteligente) es un proyecto promovido por la Secretaria de Estado de Turismo de España que persigue mejorar la competitividad de los centros turísticos nacionales y la calidad de vida de los residentes en estos destinos. Se trata de un programa novedoso y pionero dentro del sector, tanto a nivel nacional como internacional.

Para alcanzar sus objetivos, el programa DTI está impulsando la implantación de un modelo de gestión que tiene en cuenta la transversalidad de las actividades turísticas y las características particulares de cada destino.

El riguroso proceso de certificación de los destinos dentro de este programa DTI implica que solo son reconocidos con el distintivo de Destino Turístico Inteligente aquellos que obtienen una puntuación en el grado de cumplimiento de los objetivos previstos igual o superior al 80%. Además, los destinos entran en un proceso de evaluación y mejora continua ya que el certificado sólo tiene una validez de dos años.

Este modelo, que refuerza el liderazgo de las políticas turísticas españolas, cuenta con el apoyo de la Organización Mundial del Turismo. Entre los destinos turísticos nacionales que ya han conseguido su certificación se encuentra Benidorm, San Sebastián, Málaga, Gijón, Santander y la isla de Tenerife.