"Todas las cosas nacen de la armonía de la naturaleza, y cada una tiene su propia forma de nutrirse de la naturaleza y crecer". En la antigua China, la gente se dio cuenta de que el destino de la naturaleza y el de los seres humanos es un destino común. Hoy en día, y basándose en este concepto, China promueve la construcción de la civilización ecológica con mucho esfuerzo, y ha obtenido grandes logros históricos. El milagro verde de Saihanba es uno de ellos. Durante sesenta años, tres generaciones de silvicultores de Saihanba han logrado transformar el suelo arenoso en un bosque excepcional. Su perseverancia es la mejor interpretación de la "coexistencia armoniosa del ser humano y la naturaleza". Y la nueva generación de Saihanba continúa practicando esta sabiduría china con la ayuda de alta tecnología y protegiendo esta "Gran Muralla Verde".