La icónica Cueva de Hongya, que desde lejos parece un enorme "castillo en el cielo" de la vida real, es una atracción imprescindible en la lista de deseos de cualquier viajero nacional o internacional que explore los encantos incomparables de Chongqing, la megaciudad del suroeste de China.

Situada en la confluencia de los ríos Yangtsé y Jialing, esta maravillosa atracción, a pesar de la "cueva" de su nombre, fue una antigua puerta de entrada al municipio. Ahora alberga un complejo de casas sobre pilotes de 11 pisos que funciona como un bullicioso centro comercial con una mezcla única de ambiente tradicional y moderno.