Una repentina y feroz tormenta de nieve cayó el 21 de noviembre sobre Harbin, en la provincia de Heilongjiang, noreste de China. En este mundo de copos de nieve arremolinados, la centenaria Catedral de Santa Sofía se presentaba por la noche como un castillo de cuento de hadas. La antigua estructura de la catedral, acentuada por el reflejo del hielo y la nieve, parecía aún más solemne y majestuosa.

Un edificio emblemático de Harbin, la Catedral de Santa Sofía es una iglesia ortodoxa oriental construida en estilo bizantino, cuya construcción comenzó en 1907. En 1997, la catedral se convirtió en la Galería de Arte Arquitectónico de Harbin, que muestra el desarrollo de la arquitectura multicultural de la ciudad a lo largo de los siglos.