Tras el Año Nuevo, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos dio a conocer datos que asestan un golpe a los estadounidenses: a partir del 2 de enero, el volumen global de la deuda pública del Gobierno federal de EE. UU. superó por primera vez los 34 billones de dólares estadounidenses. Este aumento se produjo sólo tres meses y medio después de que fueran rebasados los 33 billones de deuda de Estados Unidos y cinco años antes de lo previsto por la Oficina de Presupuesto del Congreso de dicho país.

¿Cuál es la concepción de 34 billones de dólares? De acuerdo a las proyecciones de los organismos estadounidenses, esta cantidad supera el 120 % del PIB de Estados Unidos, lo que significa que cada estadounidense contrae una deuda de al menos 100.000 dólares; esto es, si cada familia estadounidense aporta 1.000 dólares al mes, la deuda tendrá que pagarse durante 22 años. Podemos imaginar la presión que esto ejerce sobre la economía y la sociedad de Estados Unidos.
¿Cómo se ha llegado a una deuda tan enorme? Expertos en la materia explican que, para cubrir el déficit, el gobierno de Estados Unidos lleva mucho tiempo adquiriendo fondos mediante la emisión de bonos del Tesoro. Debido al extremadamente bajo coste de los préstamos, la "bola de nieve de la deuda estadounidense" se hace cada vez más grande. Tras el estallido de la epidemia de COVID-19, la economía estadounidense se encuentra en apuros. Con el fin de estimular la recuperación económica, el gobierno estadounidense emitió una gran cantidad de deuda, provocando que el crecimiento de la misma sea más rápido de lo esperado. Con el fin de frenar la inflación, la Reserva Federal continúa subiendo los tipos de interés, aumentando aún más el costo de pago de la deuda del gobierno de Estados Unidos. Junto con el aumento del gasto gubernamental y la reducción de ingresos fiscales, la escala de la deuda inevitablemente se amplía.
Y tal "bola de nieve de la deuda de EE. UU." no se detendrá. Los analistas calculan que, de acuerdo con la tendencia actual, el gobierno de EE. UU. aumentará la deuda en más de 2 billones de dólares estadounidenses al año. Teniendo en cuenta la lucha intensa entre los dos partidos de los Estados Unidos sobre la cuestión financiera y el indicio de que el Gobierno no muestra señales de abordar su problema de endeudamiento, el mundo exterior espera que el problema de la deuda de este país se deteriore aún más.
En la deuda pública de Estados Unidos, la proporción de deuda externa es muy elevada. Los repetidos máximos históricos de la deuda estadounidense y el mayor riesgo de impago afectarán inevitablemente la confianza de los inversores extranjeros en la economía de Estados Unidos. Si los inversores reducen sus tenencias o venden bonos del Tesoro estadounidense, el dólar sufrirá la presión de la depreciación, lo que a su vez agravará la carga del pago de la deuda y las dificultades de financiación del gobierno.
En el contexto de la crisis de la deuda, los dos partidos de EE. UU. entablarán una feroz batalla en el Congreso en torno a la cuestión presupuestaria, y de no lograrse un consenso, el Congreso no podrá aprobar el plan de asignaciones, con lo que el gobierno de EE. UU. puede enfrentarse de nuevo a un cierre. Una vez que esto ocurra, un gran número de empleados del gobierno se verán obligados a solicitar licencias sin goce de sueldo o al retraso en el pago de sus salarios, y el proyecto de recortar el gasto gubernamental a menudo está estrechamente relacionado con los proyectos de subsistencia. En otras palabras, es la gente común de Estados Unidos la que acabará sufriendo las consecuencias al final.
Los resultados de una encuesta realizada por Fox News en Estados Unidos a finales de 2023 mostraron que más de tres cuartas partes de los votantes registrados creen que la economía estadounidense está en malas condiciones. Es fácil notar que muchas contradicciones profundamente arraigadas en la economía estadounidense están lejos de resolverse, lo que conduce a repetidas crisis de deuda. Esto no sólo ha traído peligros ocultos y agitación a la sociedad de dicho país, sino también más incertidumbre al mundo. ¿Quién representa el mayor riesgo para la seguridad económica mundial? La respuesta es evidente.