En medio de los esfuerzos por alcanzar un desarrollo sostenible, China no ha dejado de impulsar las finanzas verdes, es decir, actividades, servicios o productos financieros que tienen en cuenta el impacto medioambiental. 

A lo largo de los años, China ha sido capaz de establecer un mercado financiero verde de múltiples niveles y diversificado con préstamos y bonos ecológicos. Al término del tercer trimestre del año pasado, por ejemplo, los préstamos pendientes verdes en divisas local y extranjera aumentaron un 36,8 % interanual hasta los 28,58 billones de yuanes, unos 4 billones de dólares, más que en ningún otro país, según datos del Banco Popular de China.

En años recientes, las instituciones financieras exteriores también han apostado por el mercado financiero verde de China, en un claro reflejo de la fortaleza y la influencia de China en el sector. 

El sector de las finanzas verdes de China ha experimentado un crecimiento exponencial en años recientes. Ante el desarrollo de numerosas oportunidades, como las que ofrecen la inversión exterior y la cooperación verde en el marco de la iniciativa de la Franja y la Ruta, el sector se prepara para experimentar un crecimiento aún mayor.