"Para mí, que Estados Unidos quiera cambiar de algún modo China a su imagen es completamente irrealista", afirmó George Yeo, ex ministro de Relaciones Exteriores de Singapur, en el discurso inaugural de un acto celebrado recientemente por la Asia Society, en el que compartió sus perspectivas sobre las relaciones entre China y Estados Unidos.

"China tiene su propia naturaleza profunda debido a su propia historia. No hay país que tenga una historia más grabada de su propio pasado que los chinos", dijo Yeo. "Así que es una codificación profunda y extensa; ¿cómo se cambia eso?".
"Por eso, que Estados Unidos piense que puede cambiar a China, es una ilusión. Y si uno construye esperanzas sobre una ilusión, sólo puede conducir a un resultado: a la tragedia", añadió.
Yeo señaló: "Si Estados Unidos acepta a China por lo que es, no creo que China quiera ser el número uno políticamente. Será el número uno económicamente por el tamaño de su población. Pero no quiere asumir la carga de ser policía mundial".
En cuanto al "exceso de capacidad" de China, Yeo afirmó que la competitividad china se deriva de su vasto mercado y de la productividad de su población. Señaló que la competitividad china "al final se basa en un mercado interior muy amplio y en una población muy trabajadora".
"Siempre ha ocurrido que cuando China está en paz y organizada, es la economía más productiva de la Tierra, y naturalmente los demás se sienten amenazados, y de hecho las industrias están amenazadas", añadió.