Para Ernesto Villegas, ministro del Poder Popular para la Cultura de Venezuela, el tema que nos reúne es de vital importancia para la sobrevivencia de la especie humana en este planeta. Apostar por un mundo próspero y en paz implica conceptualizar qué prosperidad ofrecemos los seres humanos a las futuras generaciones. No puede ser una prosperidad depredadora, es decir, que suponga la destrucción de la vida en el planeta, pues sería lo que la sabiduría popular llama pan para hoy y hambre para mañana. Así que construir un mundo próspero y en paz supone el respeto por la madre naturaleza, por la persistencia de la vida en este planeta y también por el respeto a la diversidad cultural, porque una prosperidad que no toma en cuenta las particularidades de las culturas, de los pueblos, de los grupos humanos que habitan en este planeta está destinada al fracaso. Solamente con el respeto a la diversidad y el respeto a la madre naturaleza, podremos garantizar un mundo próspero y en paz para las futuras generaciones.