Brasil asumió la presidencia del grupo BRICS el pasado 1 de enero, una alianza estratégica que reúne a algunas de las economías más importantes del mundo emergente, como Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, cuyas siglas forman el nombre del bloque, y que se amplió el año pasado. Con una agenda ambiciosa centrada en la sostenibilidad, la inclusión social y la reforma de la gobernanza global, el país busca impulsar cambios significativos.