China tiene plena confianza en sus perspectivas de desarrollo económico para 2025, a pesar de los efectos adversos potencialmente cada vez más profundos derivados de los cambios en el entorno externo, afirmó el 17 de enero Kang Yi, director del Buró Nacional de Estadísticas (BNE) de China.

Kang subrayó en una rueda de prensa que esta confianza se basa en fundamentos económicos sólidos, entre ellos un impulso de recuperación continuo, el surgimiento de nuevos motores de crecimiento, un apoyo político adecuado y la implementación de medidas de reforma y apertura.

Kang Yi, director del Buró Nacional de Estadísticas (BNE) de China
Según el BNE, la economía china se expandió un 5 % interanual en 2024, y la sólida recuperación del cuarto trimestre, resultado de una serie de medidas favorables al crecimiento implementadas desde fines de septiembre, jugó un papel decisivo para ayudar al país a cumplir su objetivo de crecimiento del PIB.
El alto funcionario chino señaló que la amplia experiencia de China en control a nivel macro, junto con la voluntad de las empresas de ser pioneras y la naturaleza trabajadora y la sabiduría del pueblo, han fortalecido la confianza en promover el desarrollo de alta calidad y abordar los riesgos y desafíos.
En cuanto a la inflación, Fu Linghui, portavoz del BNE, indicó que se espera que el índice de precios al consumidor de China aumente moderadamente en 2025.
Al considerar el potencial de crecimiento de China, Kang afirmó que, sobre la base de las investigaciones de numerosas instituciones y académicos en los últimos años, la tasa actual de crecimiento económico potencial del país aún se mantiene en un nivel medio-alto.