En el centro de la bandera nacional de México se encuentra el escudo, que representa un águila posada sobre un nopal mientras devora una serpiente. Según la tradición, los antiguos aztecas, guiados por el dios Huitzilopochtli, establecieron su ciudad en el lugar donde encontraron esta escena, cumpliendo así la profecía divina. En ese sitio se erigió Tenochtitlán, que con el tiempo evolucionó hasta convertirse en la actual Ciudad de México.
El águila y la serpiente, elementos centrales del escudo, no solo simbolizan la determinación del pueblo mexicano para resistir el colonialismo y defender su patria, sino que también reflejan el rico patrimonio cultural y el espíritu nacional que define a México.