A medianoche, después de un día ocupado, un tren de alta velocidad entra en la estación ferroviaria de Nanjing Sur, un centro clave en la provincia de Jiangsu, en el este de China. Aquí, un equipo de técnicos y robots inteligentes está listo para realizar tareas de inspección.

Utilizando tecnología de navegación y posicionamiento por radar láser, los robots se mueven a lo largo de las vías. Equipados con dos brazos articulados con dispositivos de imagen, ajustan la altura y el ángulo, escaneando meticulosamente la parte inferior y los componentes del tren, mientras transmiten análisis de inteligencia artificial (IA) en tiempo real para su posterior revisión.
Durante la temporada alta de viajes de 40 días de la Fiesta de la Primavera de este año, que comenzó el 14 de enero, se espera que la red ferroviaria de China transporte 510 millones de pasajeros, con alrededor de 14.000 trenes operando diariamente. Para garantizar la seguridad operativa durante este período de alto tráfico, los trenes deben someterse a una inspección estricta cada tres días de funcionamiento.
Actualmente, los robots de inspección inteligentes se despliegan no solo en Jiangsu, sino también en estaciones ferroviarias de ciudades como Jinan, Beijing y Shanghai.
En todo el país se está implementando una variedad de soluciones de alta tecnología para garantizar la seguridad de la red ferroviaria de alta velocidad durante el aumento de los viajes.