Para rendir homenaje a Confucio, nuestros antepasados crearon muchas imágenes de él. Esta obra es muy especial. El anciano del centro es Confucio, con aspecto digno y sereno, mirando fijamente al frente. A ambos lados están Yan Hui y Zeng Shen, dos discípulos predilectos, de pie y con las manos juntas. Lo más sorprendente es que todo el contenido de las Analectas de Confucio está escrito en sus ropas, con letra fina y regular. Aún no sabemos quién hizo esta pintura. Tal vez quería demostrar que las Analectas de Confucio son la mejor representación del pensamiento y el espíritu del maestro.
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