En la ciudad de Barkam, en la provincia de Sichuan, Gashi Wangmo, una joven diputada de la Asamblea Popular Nacional se ha dedicado a mejorar la atención a los ancianos desde 2009. 

Aunque actualmente es la directora del asilo de Barkam, Gashi Wangmo aún encuentra tiempo para brindar atención directa a los 61 ancianos que viven allí. Wangmo, como la llaman la mayoría de los residentes, asegura que haber crecido como huérfana en un centro de asistencia social local ha sido una guía en su camino desde que comenzó a trabajar en la industria del cuidado de ancianos.

En sus inicios, el reto era enorme: siendo una mujer joven tenía que cuidar de cerca de un centenar de ancianos. Wangmo debía bañar a los hombres mayores que sufrían discapacidades o padecían Alzheimer, alimentarlos y lavar su ropa. Al principio, sintió miedo y pensó en renunciar, pero decidió continuar.

Como diputada a la Asamblea Popular Nacional, Gashi Wangmo ha presentado en los últimos tres años propuestas para mejorar el bienestar del personal joven, aumentar la inversión en el sector del cuidado de ancianos y promover la participación de las empresas en esta industria. Este año, tiene nuevas iniciativas en mente.

La ciudad de Barkam cuenta con una población de más de cincuenta mil habitantes, pero la mayoría de los jóvenes optan por buscar empleo en las grandes ciudades, dejando atrás a los ancianos en aldeas rurales de la zona.

Debido a la altitud de la región, muchos de ellos padecen enfermedades crónicas como hipertensión, y aunque cuentan con un seguro para la tercera edad, los medicamentos siguen siendo costosos. Wangmo considera que se debe hacer más para abordar este problema.