El Banco de China ha establecido un fondo de 50.000 millones de yuanes (aproximadamente 7.000 millones de dólares) destinado a invertir en startups tecnológicas. Este fondo, ampliado desde los 30.000 millones de yuanes anunciados el año anterior, se centran principalmente en áreas clave como la inteligencia artificial, la tecnología cuántica y la biotecnología.

Este movimiento se alinea con las prioridades políticas de China para 2025, que buscan estimular el consumo y lograr avances tecnológicos en medio de las tensiones geopolíticas con Estados Unidos. Además, el Banco Industrial y Comercial de China (ICBC) ha lanzado recientemente un fondo similar de 80.000 millones de yuanes para apoyar la economía privada, enfocándose en sectores como semiconductores y manufactura avanzada.
Estas iniciativas tienen como objetivo apoyar a las industrias tecnológicas emergentes y fomentar la innovación en el país.