La myrica rubra es una de las frutas más desconocidas que un extranjero se encuentra cuando llega a China, y es muy posible que su primer contacto con ella le genere cara de sorpresa. Casi con toda seguridad va a tener que preguntar a un amigo chino de qué fruta se trata porque no va a encontrar una traducción posible para una fruta tan peculiar. Tras el impacto inicial, caerá en la cuenta de que también es conocida como "árbol de fresa china", "yangmei" y "arrayán chino".

Se trata de un fruto esférico de entre 1,5 y 2,5 centímetros de diámetro, de intenso color granate y ligeramente puntiaguda en la superficie. Quizá lo más sorprendente sea el sabor, porque si bien uno espera cierto dulzor en todo tipo de frutas, ésta es agridulce con toques ácidos.

Se trata de un fruto esférico de entre 1,5 y 2,5 centímetros de diámetro, de intenso color granate y ligeramente puntiaguda en la superficie.
En la provincia china de Yunnan prevalecen dos tipos de yangmei. Una variedad amarga, que normalmente se utiliza para hacer frutos secos, y una variedad más dulce, que se consume fresca y en zumos.
El árbol que la produce es nativo de algunas provincias chinas como Zhejiang, Fujian, Guangdong, Guizhou y Yunnan, entre otras, pero también se puede encontrar en Japón, la península de Corea y Filipinas.

El árbol que la produce es nativo de algunas provincias chinas como Zhejiang, Fujian, Guangdong, Guizhou y Yunnan, entre otras.