Durante el encuentro celebrado el 11 de abril con el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, el presidente chino, Xi Jinping, ha advertido que nadie sale beneficiado de una guerra de aranceles, y que actuar en contra de la comunidad internacional solo conduce al aislamiento.

Xi ha señalado que los avances de China durante los últimos 70 años han sido fruto de la autosuficiencia y la perseverancia, no de la dependencia ni del temor a presiones externas. También ha señalado que China seguirá centrada en su propio desarrollo, más allá de los cambios en el entorno internacional. El mandatario ha destacado que China y la Unión Europea, como principales economías y defensoras de la globalización, comparten la responsabilidad de salvaguardar el libre comercio. Juntas, representan más de un tercio del PIB mundial. Xi Jinping ha realizado un llamamiento a ambas partes para oponerse al unilateralismo y proteger un orden internacional justo y basado en reglas. 

Por su parte, Pedro Sánchez ha coincidido en destacar el papel clave de China como socio para la UE. Ha reafirmado el compromiso del bloque con el comercio abierto y la cooperación multilateral, y ha expresado su disposición a trabajar con China en desafíos globales como el cambio climático, la pobreza y la estabilidad económica.