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Parte el primer tren internacional China-Rusia en Shenyang, abriendo una nueva vía para la cooperación económica y comercial
Onda China

¿Sabías que China ha sido el principal socio comercial de Rusia durante 15 años consecutivos? En 2024, el volumen del comercio bilateral alcanzó los 244.800 millones de dólares estadounidenses, y el transporte ferroviario entre ambos países superó los 174 millones de toneladas, con un incremento interanual del 8%. Estos datos reflejan la creciente interdependencia económica entre China y Rusia, así como la necesidad de fortalecer las rutas logísticas entre ambos países. 

En este contexto, el 28 de abril de 2025 marcó un nuevo hito en la cooperación bilateral: partió oficialmente el primer tren internacional China-Rusia en Shenyang desde la ciudad de Shenyang rumbo a Moscú. Con una carga inicial de 150 toneladas de caucho de etileno propileno distribuida en seis contenedores, el tren cruzó la frontera por el puerto de Manzhouli, uno de los principales puntos de paso terrestre entre los dos países. Este nuevo enlace ferroviario no solo refuerza las cadenas de suministro entre China y Rusia, sino que también impulsa la construcción de un centro logístico internacional en el noreste de Asia, abriendo nuevas oportunidades para la cooperación económica y comercial regional.

Rusia continúa siendo el principal proveedor de petróleo crudo y gas natural para China, mientras que China se ha consolidado como la principal fuente de productos mecánicos, eléctricos y automóviles para el mercado ruso. Esta complementariedad se extiende a sectores clave como la energía, la agricultura, los productos electromecánicos y, cada vez más, a campos emergentes como la innovación científica y tecnológica, la fabricación de vehículos, el comercio electrónico transfronterizo y los dispositivos médicos.

El lanzamiento de este tren internacional simboliza mucho más que un nuevo canal de transporte: representa un paso estratégico hacia una cooperación bilateral más profunda, diversificada y sostenible entre dos potencias vecinas que comparten no solo intereses económicos, sino también una visión común de desarrollo regional.