"Esto se basa en prejuicios ideológicos", "ha envenenado la relación educativa de larga data entre China y Estados Unidos" y "causará un 'enorme daño' al progreso científico y tecnológico estadounidense"... La opinión pública internacional ha criticado ampliamente el anuncio del secretario de Estado de EE. UU., Marco Rubio, el día 28 de mayo, de que Estados Unidos ha comenzado a revocar los visados de estudiantes chinos. China ha expresado claramente su oposición y presentado quejas oficiales ante la manipulación política y discriminatoria de Estados Unidos, y salvaguardará firmemente los derechos e intereses legítimos de los estudiantes chinos que estudian en el extranjero.
El "bloqueo educativo" de Estados Unidos no solo apunta a China, sino también al mundo. Desde una perspectiva educativa, los estudiantes internacionales son un puente importante para los intercambios académicos internacionales. Revocar sus visas afectará la cooperación en el campo de la educación internacional, los proyectos de investigación científica y el intercambio de conocimientos, reducirá la reserva de talentos de Estados Unidos y dañará las capacidades de innovación a largo plazo del país.
Desde el nivel escolar, la principal fuente de ingresos de muchas universidades estadounidenses son las tasas de matrícula que pagan los estudiantes internacionales. La cancelación de visas para estudiantes internacionales, incluidos los chinos, inevitablemente agravará las limitaciones financieras de las universidades estadounidenses y dañará aún más la industria educativa estadounidense. Y más aún, la educación es un pilar importante del desarrollo económico y del superávit comercial de servicios de Estados Unidos.
Además, Estados Unidos siempre se ha considerado un "faro de la democracia" y presume de un entorno académico "libre y abierto". La revocación selectiva de visas de estudiantes chinos ha hecho estallar la burbuja que sopló Estados Unidos, ha dañado su credibilidad internacional y su imagen nacional como líder mundial en educación y, en última instancia, ha provocado múltiples pérdidas de talento e influencia económica y cultural.