China ha intensificado sus esfuerzos para optimizar el desarrollo del sector de los vehículos de nueva energía (NEV, por sus siglas en inglés) y consolidar el dinamismo del mercado interno, en un momento clave para su modernización económica.

Según la Agencia de Noticias de Xinhua, durante una reunión ejecutiva del Consejo de Estado presidida por el primer ministro Li Qiang, se revisaron nuevas políticas para fortalecer la circulación económica interna, promover el consumo y mejorar la regulación del sector NEV. El encuentro hizo un llamado a ampliar la inversión en fuerzas productivas de nueva calidad y servicios emergentes, y a impulsar iniciativas que satisfagan la diversidad de la demanda de los consumidores, incluyendo programas de renovación de bienes de consumo.
En paralelo, autoridades del Ministerio de Industria y Tecnología Informática, la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma, y la Administración Estatal para la Regulación del Mercado se reunieron con empresas del sector NEV para reforzar las normas de competencia. Se acordó implementar mecanismos de vigilancia de precios, inspecciones de conformidad de productos y medidas para acortar los plazos de pago a proveedores.
Entre las prioridades figura el establecimiento acelerado de estándares nacionales sobre límites de consumo energético y seguridad en el reciclaje de baterías, así como la creación de canales regulares de diálogo con fabricantes para recoger sus propuestas y atender sus inquietudes.
Ambas reuniones coincidieron en la necesidad de frenar las dinámicas de competencia irracional que afectan la sostenibilidad de la industria. China busca así garantizar un entorno de mercado justo, honesto y predecible, promoviendo el desarrollo de alta calidad del sector de los vehículos eléctricos —una de las piedras angulares de su transformación industrial— al tiempo que activa nuevos motores del consumo y fortalece su resiliencia económica interna.