En la Región Administrativa Especial de Hong Kong, en la mañana del 9 de diciembre, los manifestantes realizaron lo que calificaron como una "huelga general".
Pese a los intentos de interrumpir la red de transporte de la ciudad, ésta no se vio afectada de modo significativo. La marcha llevada a cabo fue mayoritariamente pacífica, aunque la Policía declaró que algunos manifestantes infringieron la ley.
"Aunque dicen no hacerlo, ellos desafían al imperio de la ley. Provocaron un incendio intencionado en los edificios de los tribunales. Ayer en las primeras horas de la mañana, arrestamos a once personas, siete hombres y cuatro mujeres. Incautamos un arma semiautomática, más de cien balas, algunas armas cortopunzantes, así como un número de chalecos antibalas. Estos son casos muy serios y demuestran que el orden público pende de un hilo", expresó Kwok Ka-chuen, superintendente en jefe de la Oficina de Relaciones Públicas de la Policía.