Cuando un paciente en un hospital improvisado en Wuhan, la región más afectada por el brote del nuevo coronavirus en la provincia china de Hubei, pidió a través de la plataforma de redes sociales WeChat ver pandas gigantes cuando se recuperara, nunca pensó que alguien tomaría eso en serio y trabajaría para hacer realidad su deseo.
Zhang Zhihe lo hizo. Es el director de la Base de Investigación de Cría del Panda Gigante de Chengdu, capital de la provincia de Sichuan, en el suroeste de China.
Después de enterarse del deseo, decidió hacer vídeos del esponjoso animal blanco y negro y luego mostrárselos a los pacientes, en un intento por brindarles alegría y fortaleza.
El proyecto comenzó el 16 de febrero cuando Zhang y su equipo eligieron a Chenglang para ser la estrella en el vídeo. Chenglang era la bebé panda gigante más ligera al nacer en el mundo. Nació pesando solo 42,8 gramos en junio de 2019 y era aproximadamente del tamaño de un pulgar humano, pero, ahora, se ha convertido en una panda hembra saludable que pesa 18,7 kg.

Chenglang nació pesando solo 42,8 gramos en junio de 2019 y era aproximadamente del tamaño de un pulgar humano, pero, ahora, se ha convertido en una panda hembra saludable que pesa 18,7 kg.
"Cuando bebió leche por primera vez, Chenglang mostró un fuerte sentido de supervivencia", dijo un miembro del equipo de Zhang. "Es por eso que la elegimos para ser el personaje principal del vídeo. Queremos que brinde consuelo, fortaleza y confianza a los pacientes que sufren la infección por el virus".
El 17 de febrero, se envió el vídeo, que mostraba a pandas gigantes y que tomó 36 horas de preparación, a lo largo de una distancia de 1.152 kilómetros, desde Chengdu a Wuhan, y alcanzó rápidamente a más de 400 pacientes en un hospital improvisado.