Un equipo de científicos descubrió con sorpresa en un ámbar el cráneo perfectamente conservado del ave más pequeña conocida. Es más pequeña que el colibrí más pequeño, y fue encerrada en ámbar hace 99 millones de años, dejando tras de sí muchos rasgos extraños, incluidas las mandíbulas tachonadas con numerosos dientes pequeños. Nombrado como Oculudentavis khaungraaethis, el pájaro es también el dinosaurio más pequeño que se haya descubierto, y más antiguo que el famoso tiranosaurio rex.
La investigación fue realizada por un equipo de científicos chinos, estadounidenses y canadienses, y dirigida por Xing Lida, paleontólogo y profesor de la Universidad de Geociencias de China. Sus descubrimientos fueron publicados en la revista Nature esta semana.