Privacidad y Cookies

Al continuar navegando en esta web acepta el uso de cookies, la política de privacidad revisada y los términos de uso. Puede cambiar la configuración de las cookies en su navegador.

Estoy de acuerdo
PM de Australia: 80 % de los casos son importados, principalmente desde EE. UU.
CGTN en Español

(Portada: Primer ministro australiano Scott Morrison habla durante una conferencia de prensa conjunta con la primera ministra neozelandesa Jacinda Ardern en la Casa del Almirantazgo en Sídney, Australia, 28 de febrero de 2020/ Reuters)

El primer ministro de Australia, Scott Morrison, afirmó que alrededor de 80 por ciento de los casos de coronavirus provienen de aquellos que se contagiaron en el extranjero o que estuvieron en contacto con alguien que regresó desde fuera del país.

"Una abrumadora proporción de los casos en Australia es importada", dijo Morrison en una conferencia de prensa el 20 de marzo. Mientras que en una entrevista para el canal 2GB el mismo día, dio más detalles al respecto, afirmando que EE. UU. es el país de origen de la mayoría de los casos de coronavirus en Australia.

"El país que en realidad ha sido responsable por este gran número (casos de coronavirus) es en realidad Estados Unidos", indicó el primer ministro, atribuyendo la gran cifra de importación de casos al fracaso de EE. UU. en realizar un número adecuado de pruebas, lo que sugiere que EE. UU. puede haber tenido muchas más infecciones en las semanas recientes de las que ha comunicado.

"No creo que se esté sugiriendo que algún país, incluyendo China, haya hecho algo deliberadamente", expresó Morrison.

"No creo que se esté sugiriendo que algún país, incluyendo China, haya hecho algo deliberadamente", expresó Morrison.

Un informe del Departamento de Salud de Australia reveló que un tercio de las infecciones se remontaban a viajeros de EE. UU.

Al domingo, Australia tenía 1.286 casos confirmados de coronavirus, con el total duplicándose cada tres días aproximadamente, de acuerdo con el departamento. 

El gobierno de Morrison estimó antes que cerca de 150.000 australianos podrían morir de coronavirus en el peor de los escenarios.

Anteriormente esta semana, Morrison anunció una prohibición de reuniones no esenciales de 100 o más personas en el país, pero eximió a escuelas, universidades, tiendas, servicios de salud y transporte público.

El país cerró sus fronteras el 20 de marzo a extranjeros, exceptuando a ciudadanos australianos y residentes permanentes en una apuesta por contener el virus.