Las grandes ciudades de China han intensificado las medidas de detección en un intento de limitar el número de casos importados de COVID-19.
La Administración de Aviación Civil del país ha anunciado que todos los vuelos internacionales de pasajeros con destino a Beijing serán desviados a 12 puntos de entrada designados a partir del 23 de marzo. Shanghai también llevará a cabo pruebas de ácido nucleico en todos los pasajeros procedentes de países y regiones que no se hayan visto gravemente afectados.

Las grandes ciudades de China han intensificado las medidas de detección en un intento de limitar el número de casos importados de COVID-19.