(Fuente: AP)

A medida que América Latina se convierte en el último epicentro de las infecciones por COVID-19, algunos de los restaurantes y comedores emblemáticos de la región intentan adaptarse a las medidas de distanciamiento social recurriendo a menús más ajustados.

La alta cocina ha tenido que reinventarse en países latinoamericanos, pero la realidad es que miles de restaurantes han ido a la quiebra.

Antes de que la pandemia comenzara, el restaurante Leo se enorgullecía de llevar a los clientes a un viaje culinario por Colombia. Ahora, la situación es muy diferente, puesto que la chef Leonor en estos momentos usa la cocina de su restaurante para hacer platos para llevar.

Ahora, la situación es muy diferente, puesto que la chef Leonor en estos momentos usa la cocina de su restaurante para hacer platos para llevar.

En Argentina, el asador Don Julio ocupó el lugar 34 en la lista de San Pellegrino de los mejores restaurantes del mundo el año 2019. Ahora se ha convertido en una carnicería que entrega cortes de carne orgánica a los clientes de Buenos Aires.

Lo cierto es que en América Latina, donde prevalece la economía de mercado, los restaurantes de élite se preparan para un futuro más austero.