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Médico francés decidió quedarse en Wuhan durante la epidemia
CGTN en Español

Philippe Klein es un médico generalista francés que sigue trabajando en Wuhan.

En diciembre del año pasado, estalló la epidemia de neumonía por coronavirus en Wuhan. A medida que se desarrollaba la epidemia, muchos ciudadanos franceses que vivían y trabajaban en la ciudad se fueron uno tras otro, pero Klein decidió quedarse.

“No podría hacer nada si regresara. Soy médico, y Wuhan es donde trabajo", dijo él.

Durante 6 años en Wuhan, el médico generalista ha trabajado en la Clínica Internacional del Hospital de la Unión de Wuhan, principalmente brindando servicios a extranjeros en la ciudad. Desde el brote de coronavirus, para prevenir la infección cruzada, la clínica ambulatoria internacional del hospital se cerró temporalmente. Sin embargo, Klein no se tomó vacaciones; en cambio, con la ayuda en línea de colegas chinos, atendió a los extranjeros que lo necesitaran.

En contacto diario con diversas enfermedades y pacientes, Klein entendió profundamente el peligro de la COVID-19. "Trabajar aquí no solo es una obligación moral, sino un requisito profesional. Aunque es solo una pequeña posición en el frente de la lucha contra la epidemia, es una forma que tengo de ayudar a los ciudadanos de Wuhan a sobrevivir".

Philip Klein (primero desde la izq.) con colegas en la clínica (foto de archivo)

"Sabemos muy poco acerca del virus. Todo lo que podemos hacer ahora es esperar con paciencia". Durante la conversación, Klein reitera que espera ser una voz positiva en tiempos difíciles. "Se trata de mi manera de enfrentar las dificultades de la vida".