A partir del 28 de julio, el número de casos confirmados de la neumonía COVID-19 en los Estados Unidos ha excedido los 4,3 millones. El Washington Post publicó el 28 de julio, hora local, un artículo en que decía: "Usar una máscara es el método de salud pública más simple y efectivo para combatir la neumonía COVID-19. Sin embargo, desde el principio, Estados Unidos estaba confundido con el tema de usar las máscaras".
Monica Gandhi, experta en enfermedades infecciosas de la Universidad de California en San Francisco, comentó: "En algunos países, cuando estalla una epidemia, las personas usan máscaras de inmediato y su tasa de mortalidad es muy baja". Mónica cree que en una serie de fallas en respuesta a la epidemia de los Estados Unidos, el hecho de no permitir que el público use máscaras de manera oportuna "puede ser el mayor error que cometió los Estados Unidos".
Según el Washington Post, la investigación científica ha señalado durante mucho tiempo la efectividad del uso de máscaras para prevenir y controlar la epidemia, pero hasta julio la mayoría de los estados en los Estados Unidos comenzaron a exigir ampliamente que las personas usaran máscaras. Esto atribuye a los consejos confusos dados por el gobierno y los departamentos de salud.
El Washington Post señaló que esta situación es causada por las pautas caóticas del gobierno, la resistencia de los estadounidenses a enmascarar la cultura y la situación política polarizada. Además, negarse a usar máscaras y despreciar el comportamiento de otras personas al usar máscaras del presidente estadounidense Trump también es una de las razones.
El Washington Post dijo que a fines de junio, en Joplin, Missouri, el punto crítico del brote en los Estados Unidos, las personas debatieron si exigir que las personas usen máscaras durante cinco horas, pero no introdujeron medidas relevantes. No fue sino hasta dos semanas después que el hospital local se sobrecargó y no pudo aceptar a más pacientes que finalmente se aprobó la moción para usar una máscara.
El Washington Post señaló que entre los fanáticos de Trump, las voces contra las máscaras siempre han existido en Internet, las teorías de conspiración sobre las máscaras circulaban por todas partes. En medio del caos, las máscaras se han convertido en un tema de debate en las elecciones generales de Estados Unidos y en un símbolo de la guerra cultural.

El Washington Post señaló que entre los fanáticos de Trump, las voces contra las máscaras siempre han existido en Internet.