En el cuadro masculino de este Masters de Cincinnati que, por razones de seguridad debido a la COVID-19, se disputa en Nueva York, la raqueta número uno del mundo, Novak Djokovic, saltó ayer a la pista rápida estadounidense con su mejor versión, lejos de la errática que exhibió en dieciseisavos ante el desconocido lituano Ricardas Berankis.
Con la contundencia de costumbre y sin ceder ni en una sola ocasión su servicio, el serbio despachó en un par de mangas al estadounidense Tennys Sandgren.
La victoria supuso para Novak su inclusión número 84 en los cuartos de final de un Masters 1000 de la ATP, con lo cual recortó distancias con los líderes históricos: el español Rafael Nadal, con 92, y el suizo Roger Federer, con 87.

Novak Djokovic.