Un conductor de tren en los Países Bajos ha tenido suerte en un descarrilamiento gracias a una instalación de arte colocada fortuitamente.
Un tren del metro en Spijkenisse, cerca de la ciudad de Rotterdam, se estrelló contra una barrera al final de las vías poco antes de la medianoche del 2 de noviembre.

Se estrelló contra una barrera al final de las vías poco antes de la medianoche del 2 de noviembre.
Pero en lugar de caer en picado 10 metros en el agua, el tren quedó suspendido dramáticamente en el aire. Terminó delicadamente en equilibrio sobre la gran escultura de la cola de una ballena en la estación de metro De Akkers.
La escultura, titulada Whale Tails, es obra del arquitecto y artista Maarten Struijs, y fue erigida en el agua al final de las vías en 2002.

La escultura, titulada Whale Tails, es obra del arquitecto y artista Maarten Struijs, y fue erigida en el agua al final de las vías en 2002.