El 20 de noviembre, en la ciudad de Edmonton, Canadá, se lanzó un nuevo sistema de protección de paquetes, Snare, con la esperanza de evitar que los ladrones los roben.
Este dispositivo de protección se puede instalar en la pared o en la barandilla de la puerta de entrada. Un cable fuerte se extiende desde el mismo, con el cual el mensajero puede atar el paquete, y luego el propietario del paquete puede abrir el dispositivo con una llave.
El empresario Dennis Evans explica: "Empecé Snare porque quería resolver un problema que yo había experimentado personalmente. Mis pedidos en línea fueron robados directamente de mi porche".
La versión de preproducción de este dispositivo tiene un precio de 69 dólares canadienses.