En el Gran Premio de Baréin de F1, durante la carrera se produjo un accidente que ha conmocionado al mundo del motor. Romain Grosjean se salió de la curva 3 del circuito a más de 200 kilómetros por hora y se estampó contra un bloque de acero situado detrás de los guardarrailes de seguridad. Todo el mundo se temió lo peor cuando el monoplaza fue engullido por las llamas, pero a los 30 segundos el piloto salió del amasijo de hierro y fuego por su propio pie, consumando lo que fue el milagro de la noche. El conductor francés fue trasladado en helicóptero a un hospital cercano para ser sometido a un chequeo médico.
Una vez reanudada la carrera no hubo más sorpresas ya que Hamilton volvió a ganar, sumando su onceava victoria de la temporada.
Tras la carrera, el propio Grosjean y su equipo publicaron un vídeo en las redes sociales para tranquilizar a todos.

Todo el mundo se temió lo peor cuando el monoplaza fue engullido por las llamas, pero a los 30 segundos el piloto salió del amasijo de hierro y fuego por su propio pie.