El Carnaval de Río ha sido pospuesto por la pandemia, lo que ha dejado a miles de trabajadores del festival sin labor. Ahora, un artista ha decidido utilizar su talento para concienciar sobre la importancia de usar mascarillas. Estos cubrebocas "realistas" hechos a medida se han convertido en un éxito gracias a la unión de la creatividad y la concienciación. 

Guantes, pintura para tela, pinceles,una paleta para mezclar tonos de piel y una máscara. Empleando técnicas de pintura centenarias, Jorge Roriz, de 65 años, ha pasado del teatro a un negocio más urgente: salvar la vida de las personas. El artista carioca ha pasado los últimos cuarenta años de su vida creando trajes para lo que los brasileños llaman la "Fantasía" del Carnaval. Pero cuando el festival fue pospuesto debido a la pandemia, en lugar de desesperarse, decidió ayudar en el esfuerzo de persuadir a la gente a tomarse el uso de mascarillas en serio.

Jorge Roriz, artista de Río de Janeiro.

"La idea era encontrar una manera de recordar a la gente la importancia de cuidarse y de protegerse a sí mismos", dijo Jorge Roriz.

Los primeros llamamientos de Jorge fueron a través de vídeos en Instagram en los que mostraba elaborados maquillajes. Todo con el mensaje: máscaras, úsenlas. Posteriormente tuvo una idea aún más persuasiva: utilizar el humor.

Jorge afirma que trata de hacer sus máscaras lo más realistas posible, usando fotografías que sus clientes le envían directamente a su teléfono. Pinta hasta 10 mascarillas al día y asegura haber perdido ya la noción de cuántas ha hecho desde que comenzó en abril. Los cubrebocas incluyen representaciones realistas de barbas, bigotes y pintalabios, dependiendo de las fotos del cliente y de sus peticiones especiales. Los pedidos vienen de todo Brasil e, incluso, del extranjero.