El pueblo de Sanhe se encuentra en la prefectura autónoma de la minoría étnica Lisu, en la provincia china de Yunnan. Hasta esta localidad rural del distrito (municipio) de Lushui ha llegado en los últimos tiempos una nueva profesión, la de guía ornitológico.
El turismo de observación de aves no solo está ayudando a los lugareños a proteger el medio ambiente, sino que también contribuye al desarrollo económico del pueblo. El funcionario local Zhang Chaojiang se autodefine como "tío de los pájaros". Zhang ha creado un auténtico paraíso de las aves en Sanhe que ha sacado a miles de vecinos de la pobreza.
El pueblo Sanhe se encuentra en la montaña de Gaoligong, en el Gran Cañón de Nujiang. Más del 90 por ciento de la zona está cubierta de frondosos bosques, lo que lo convierte en un verdadero paraíso de las aves, con hasta 208 especies. Aunque cuenta abundantes recursos naturales, el terreno cultivable es limitado. La población local, de 1300 personas, tiene dificultades para obtener ingresos sostenibles. Zhang Chaojiang fue enviado por la Oficina de Ciencia y Tecnología de la prefectura de Nujiang. Su llegada ha convertido las montañas en una auténtica mina de oro.
Para promover la marca "Valle de los pájaros" y brindar mejores servicios a los turistas, Zhang Chaojiang animó a los habitantes del pueblo a establecer "talleres de alivio de la pobreza" en las montañas. En este caso, en forma de lugares para la observación de las aves. Los vecinos se encargan así de atraer a los pájaros con agua y alimentos y de atender a los visitantes, lo que les ayuda a generar ingresos.
El desarrollo de la economía gracias a la observación de aves no solo ha ayudado a los guías aquí a salir de la pobreza, sino que también ha animado a otros vecinos del pueblo a dedicarse activamente al ecoturismo. Muchos de ellos han puesto en marcha "casas de los pájaros", donde ofrecen platos típicos de la zona y alojamiento a los visitantes. Así, el Valle de los Pájaros cuenta con una cadena de negocio completa y ha creado nuevos puntos de crecimiento económico.
En la actualidad, los turistas al Valle de los Pájaros provienen de 38 provincias y ciudades de China, e incluso unos visitantes vienen de Estados Unidos, Australia, Malasia, Japón y Singapur. Entre ellos, hay muchos ancianos que vienen a observar a los pájaros y tomar fotos. Tang Shunsheng, un entusiasta de la fotografía de 80 años procedente de Tongren, en la provincia de Guizhou, captura con su cámara cada pájaro del valle.
En cierto modo, no es fácil mantener un equilibrio entre la protección medio ambiental y el desarrollo económico. Sin embargo, aquí no es nada contradictorio. Lushui no solo ofrece una gran plataforma de observación de aves para los aficionados tanto nacionales como extranjeros, sino que también se favorece una mejor protección del hábitat de los pájaros preciosos. El desarrollo del turismo ecológico de Lushui ha ayudado a miles de aldeanos locales a modificar la mentalidad dominante a la hora de aprovechar los recursos naturales, salir de la pobreza y lograr un desarrollo sostenible y ecológico.

Avanzando juntos contra la pobreza: Los vecinos de un pueblo de Yunnan han conseguido mejorar su economía gracias al turismo de observación de aves.